Las Corbatas son un dulce emblemático de Cantabria, una región situada en el norte de España conocida por su rica tradición culinaria. Estos deliciosos pastelitos de hojaldre con forma de corbata no solo son una delicia para el paladar, sino que también tienen algunos datos curiosos que vale la pena mencionar.

El origen de las Corbatas se remonta al siglo XIX, cuando fueron creadas por un pastelero de la ciudad cántabra de Unquera. Según cuenta la historia, este pastelero quedó fascinado por la elegancia de las corbatas que llevaban los marineros de la zona y decidió crear un dulce que reflejara su forma. Así nacieron las famosas Corbatas, una mezcla perfecta de sabor y tradición.

Las Corbatas se caracterizan por su delicada masa de hojaldre, que se enrolla en forma de corbata y se rellena con una mezcla de almendras molidas, azúcar y ralladura de limón. El resultado es un dulce crujiente por fuera y tierno por dentro, con un sabor dulce y aromático que deleita a quienes lo prueban.

La forma de las Corbatas es uno de sus aspectos más distintivos. Su diseño se asemeja a una corbata, con los extremos doblados hacia el centro. Este detalle no solo las hace visualmente atractivas, sino que también les otorga un nombre único y reconocible en toda la región de Cantabria.

Las Corbatas son tan apreciadas en Cantabria que se han convertido en un producto emblemático y muy popular. Son un regalo típico que los visitantes de la región llevan a sus seres queridos como muestra de la rica cultura gastronómica de Cantabria.

Aunque las Corbatas se pueden encontrar en diversas panaderías y pastelerías de Cantabria, el pueblo de Unquera sigue siendo considerado el lugar de origen y la cuna de este delicioso dulce. Allí, podrás encontrar varias panaderías que han mantenido viva la tradición de elaborar las auténticas Corbatas, conservando la receta original y brindando a los visitantes la oportunidad de probar este manjar único.

Si tienes la oportunidad de visitar Cantabria, te invito a probar las auténticas Corbatas. No solo disfrutarás de un dulce delicioso, sino que también te sumergirás en la rica tradición pastelera de la región y te llevarás contigo un pedacito de Cantabria en forma de dulce.