Enjuaga los garbanzos secos y ponlos a remojar en agua fría durante al menos 8 horas o toda la noche. Luego, escúrrelos y reserva.
- En una olla grande, agrega los garbanzos remojados, las costillas de cerdo, el morcillo de ternera y el hueso de jamón. Cubre los ingredientes con agua fría y lleva la olla a ebullición a fuego alto.
- Mientras tanto, pela y corta la cebolla en trozos grandes. Pela y corta las zanahorias en rodajas gruesas.
- Una vez que el agua esté hirviendo, reduce el fuego a medio-bajo y agrega la cebolla y las zanahorias a la olla. Cocina a fuego lento durante aproximadamente 1 hora y media, o hasta que los garbanzos estén tiernos y las carnes estén bien cocidas y tiernas.
- Mientras se cuece el cocido, pela las patatas y córtalas en trozos grandes. Lava y corta el repollo en trozos pequeños.
- En una sartén aparte, calienta un poco de aceite de oliva virgen extra y agrega los dientes de ajo finamente picados. Sofríe el ajo hasta que esté dorado y aromático.
- Agrega el repollo a la sartén y saltéalo durante unos minutos hasta que se ablande ligeramente.
- Cuando los garbanzos y las carnes estén listos, retira las carnes de la olla y córtalas en trozos más pequeños si lo deseas. Vuelve a colocar las carnes en la olla junto con las patatas y el repollo salteado.
- Cocina a fuego medio durante aproximadamente 20-30 minutos más, o hasta que las patatas estén tiernas y se haya mezclado bien el sabor de todos los ingredientes.
- Prueba y ajusta la sal según sea necesario.
- Sirve el cocido lebaniego caliente, acompañado de un poco de caldo y pan crusty.
El Cocido Lebaniego es un plato reconfortante y abundante que se disfruta tradicionalmente en Cantabria durante los meses más fríos del año. Espero que esta receta te haya sido útil y que disfrutes de este delicioso plato lleno de sabor y tradición. ¡Buen provecho!
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