Por todo ello, ha confiado en que el nuevo mirador sirva para animar a vecinos y turistas a que se acerquen hasta Aloños para disfrutar en unas condiciones óptimas de “una de las mejores vistas que tenemos en Cantabria”. “Desde este lugar en unos pocos meses podremos disfrutar de una vista maravillosa de todos los Valles Pasiegos y de sus pueblos”, ha remarcado Blanco, quien se ha congratulado por los esfuerzos de su departamento de “seguir recuperando espacios degradados” en la región.

Por su parte, el alcalde de Villacarriedo ha destacado el esfuerzo que ha realizado el Gobierno de Cantabria para impulsar un proyecto que va a beneficiar medioambientalmente al municipio y permitirá a vecinos y visitantes disfrutar de un importante recurso ambiental de forma respetuosa y compatible con su preservación, generando además nuevos atractivos para el turismo de la naturaleza en el municipio. El proyecto ya está en marcha, con las obras iniciadas, ha insistido Sainz, y dentro de poco se verá desde aquí todo el pueblo y todo el valle de Carriedo.

En la visita también ha participado el director general de Biodiversidad, Medio Ambiente y Cambio Climático, Antonio Lucio, y varios miembros de la Corporación municipal.

El nuevo mirador

El proyecto constructivo de mirador consistirá en el empleo de varios elementos que formarán un conjunto único con pleno significado, tales como elementos vegetativos, pavimentos destinados a la estancia y a la movilidad personal o vehicular, el mobiliario para sentarse o delimitar espacios, y la señalización.

Así, se prevé la plantación de un hayal, por su vinculación con el Hayal de Aloños, de tal forma que desde Aloños será fácil identificar la localización del mirador, sin romper la armonía del paisaje.

También se empleará un cierre de características similares a los cierres de fincas existentes en la zona, utilizando madera de castaño por su gran durabilidad y cables de acero galvanizado para evitar los daños accidentales a personas. En la zona central del mirador se colocarán dos asientos o bancos con piedra arenisca, el mismo material que se utilizará para el pavimento peatonal y los limitadores del espacio, y se creará un seto autóctono en la zona de estacionamiento, con 56 ejemplares de 6 especies diferentes.

La actuación se completará con una zona de pradera atlántica mediante un semillado mixto de elementos florales y de gramíneas, sobre la que se colocará una manta de coco biodegradable para proteger el talud de la erosión hasta que se produzca el crecimiento de la vegetación.

El mirador incluye un panel informativo en el que se explica el paisaje del Valle de Carriedo y como se construyó y ha ido evolucionando con el paso del tiempo hasta la actualidad, así como otro, en el que se analizan visualmente los paisajes de los Valles Pasiegos que se pueden observar desde del mirador: Valle de Carriedo, Peña Cabarga, Cabárceno, Pasiego de Viaña, Yera, Pandillo, Las Enguinzas, Pozos de Noja, Castro Valnera, Los Picones, Lunada, Brenavinto y Bustalvente.

Todo ello para explotar el potencial visual del paisaje con vistas panorámicas desde la ladera y mejorar la percepción y comprensión de sus elementos con información sobre los valores que dan relevancia al paisaje y singularidad de los recursos naturales, culturales e históricos del entorno natural.

También acondicionar el espacio para su uso, optimizando la durabilidad, la resistencia de la estructura y de los materiales a las condiciones climáticas de la zona, cumpliendo con toda la normativa urbanística y sectorial.