Los órganos judiciales de Cantabria recibieron durante el primer trimestre de este año 303 demandas de disolución matrimonial, un 13,7 por ciento menos que las registradas en el mismo periodo de 2021, cuando el retroceso medio del país fue del 0,5%, según datos del Consejo General del Poder Judicial.
Estas demandas de disolución matrimonial suponen una tasa de 51,8 por cada 100.000 habitantes, inferior a la media nacional del 53,3.
Además, los órganos judiciales de Cantabria registraron 107 procedimientos para la modificación de medidas acordadas en sentencia y 140 en los que se solicita la fijación de medidas de guarda y custodia sobre menores nacidos en parejas no casadas y que se han disuelto. Seguir leyendo…
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