Los centros educativos de Cantabria retoman este lunes las clases tras las vacaciones de Navidad sumando 182 bajas entre el personal docente notificadas en los seis últimos días, desde el 5 de enero, y con la guía de actuación frente a los contagios de coronavirus aún sin actualizar.

Precisamente, la Consejería de Educación se reunía para ello a las 12.00 horas con la Dirección General de Salud Pública, que aportará una serie de indicaciones y entre otros asuntos decidirá si se adopta estrictamente lo acordado el pasado viernes a nivel nacional por la Comisión de Salud Pública de confinar aulas completas a partir de cinco positivos o si se hace alguna modificación.

Así lo ha dicho este lunes la consejera de Educación y Formación Profesional, Marina Lombó, a preguntas de la prensa sobre el número de positivos que serán necesarios para poner en cuarentena a toda una clase en Cantabria, después de que algunas comunidades hayan planteado diferentes posturas.

Lombó ha respondido que «es un tema puramente sanitario y se abordará con Salud Pública», y por tanto su departamento se pronunciará «en cuanto tenga esa reunión» en la que se actualizará la guía de actuación. Lo que sí se adoptará, como ya se anunció la semana pasada, es la reducción de los confinamientos de diez a siete días.

La consejera ha hecho estas declaraciones en una rueda de prensa que ha ofrecido para informar de los avances en torno al futuro conservatorio de Torrelavega justo antes de ese encuentro con Salud Pública. Y previamente, a las 8.30 horas, la Consejería se ha reunido con los comités de directores de Infantil, Primaria, Secundaria y educación concertada para «explicarles como está la situación». Continuar leyendo…

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